El fiscal Carlos Bahamondes acreditó en un juicio oral que Mario Inzunza Pérez es responsable de dos delitos de robo con intimidación y dos delitos de robo en lugar destinado a la habitación, los que cometió entre febrero y junio del año pasado.
A cumplir una pena de 15 años y un día de presidio fue sentenciado hoy un hombre que la semana pasada enfrentó un juicio oral en el que la Unidad del Sistema de Análisis Criminal y Focos Investigativos (SACFI), de la Fiscalía Regional de Los Ríos, acreditó su participación en cuatro delitos de robo que perpetró el año pasado en la comuna de Valdivia.
El fiscal Carlos Bahamondes Monsalvez presentó en el juicio oral las pruebas testimoniales, periciales, documentales y materiales reunidas por la Fiscalía durante la etapa de investigación, con las cuales demostró al tribunal que el acusado Mario Andrés Inzunza Pérez cometió entre febrero y junio del año pasado dos delitos de robo con intimidación contra taxistas y dos delitos de robo en lugar destinado a la habitación, los que afectaron a domicilios ubicados frente a áreas verdes.
Tres días después, el condenado Mario Inzunza contactó a un taxi y lo abordó junto con otro acusado identificado como Héctor Luengo, en la calle Camilo Henríquez. Una vez que el conductor los trasladó hasta la calle Honorindo Landa, lo inmovilizaron con el cinturón de seguridad y le sustrajeron $102 mil en efectivo y un teléfono celular. Por su participación en este delito, Héctor Luengo fue sentenciado a cumplir una pena de 5 años y un día de presidio.
Posteriormente, el 1 de mayo del año pasado, el condenado Inzunza Pérez utilizó el mismo modus operandi para robarle especies a otro taxista: lo contactó por teléfono para que lo recogiera a él y a un acompañante en la avenida Circunvalación Sur, y al llegar a Las Animas lo apuntaron con un arma que aparentaba ser de fuego, apropiándose de una gargantilla de oro, un reloj, un teléfono celular y $60 mil en efectivo. Luego intentaron apropiarse del vehículo, pero la víctima forcejeó con ambos y logró arrebatarle el arma a Inzunza y bajarle la mascarilla que cubría su rostro, tras lo cual los delincuentes huyeron.
Finalmente, el 8 de junio de 2020, Inzunza ingresó a robar a una casa del sector El Bosque rompiendo un vidrio con una piedra y desde el interior sustrajo un televisor de 44 pulgadas y un notebook.
La identificación y posterior detención del condenado Mario Inzunza se produjo gracias a las diligencias de investigación dirigidas por la Unidad SACFI de la Fiscalía Regional de Los Ríos y realizadas en conjunto con la Brigada Investigadora de Robos de la PDI.
