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miércoles, abril 24, 2024

Apps inclusivas, no discriminatorias

El martes 22 de octubre, Twitter, la red social con 340 millones de cuentas activas en el mundo, debió disculparse luego que muchos usuarios denunciaran que al subir imágenes, la plataforma seleccionaba automáticamente como miniatura la parte de la foto dónde aparecían rostros blancos en desmedro de los negros. Lo anterior es solo uno de muchos ejemplos que nos hacen cuestionar si la tecnología disponible hoy en día, a través de hardwares y aplicaciones, nos considera a todas y todos.

Por Laura Mangifesta
Directora de Comunicación en Mumuki

Por ejemplo, el reconocimiento del habla, desarrollo con más de 50 años, hoy ocupa un rol predominante en las comunicaciones. Teléfonos móviles, televisores inteligentes y comandos del computador se activan fonéticamente. De hecho, Google calcula que para el 2023 van a haber 8 mil millones de asistentes de voz que se podrán conectar a partir de nuestras palabras. Sin embargo, esta tecnología aún resta a personas con dicciones “diferentes a la media”, por ejemplo a aquellas con síndrome de down.

Por otro lado, lo recientemente ocurrido con Twitter en relación al reconocimiento facial (herramienta presente en casi todas las redes sociales), demuestra otra gran brecha. Ya en el 2015, Joy Buolamwini, investigadora del Instituto de Tecnología de Massachusetts (MIT), comprobó que algunos softwares, como los creados por empresas como Amazon, no detectaban los rostros de piel oscura como el de ella y que la falla era aún mayor cuando se trataba de identificar a una mujer de tez morena por sobre los hombres blancos.

Proveer pleno acceso universal a la información en el siglo XXI es una obligación para los desarrolladores de tecnología, software e inteligencia artificial. Para cumplir con este mandato, es fundamental que en el proceso de diseño y testeo intervenga un equipo diverso, representativo de la sociedad en su totalidad, que sea capaz de incluir las necesidades y apreciaciones de los distintos colectivos que configuran la heterogénea realidad cultural.

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