La tarde de este jueves en el Palacio de La Moneda se desarrolló una ceremonia en la que se distinguió a una treintena de trabajadores radiales de todo Chile, desde Arica hasta Punta Arenas. En la ocasión, se entregó un reconocimiento a la trayectoria de Edurne Echenique Opitz, madre de Carolina Olave Echenique, en representación de Radio Austral de Valdivia.
Carolina relató que la ceremonia “se realizó en el Palacio de La Moneda, aquí en la capital, y se destacó a los trabajadores radiales de Chile. Fue presidida por el subsecretario general de Gobierno, Erwin Díaz, y contó con la presencia de diferentes representantes gremiales del mundo radial, además de una treintena de trabajadores de regiones, desde Arica hasta Punta Arenas, que fueron galardonados”.
La actividad comenzó con un compendio de voces que definían lo que significa la radio en una palabra: compañía, vida, compromiso social y responsabilidad. Al respecto, Olave comentó que “también se resaltó que la radio sigue siendo el medio más confiable. Fue una ceremonia breve, pero cargada de simbolismos, con discursos que destacaron el trabajo y la importancia de la radio y sus operadores”.
Consultada sobre lo que significó para ella este reconocimiento, Carolina expresó: “Quien debería haber estado recibiendo este reconocimiento era él —su padre, Augusto Olave—. Yo crecí al alero de la radio y de lo que significa, incluso inicié algunos trabajos vinculados a ella. Fue un momento muy significativo, considerando que ya no está. Estoy segura de que estaría contento de haber sido representado por una de sus hijas en esta ocasión”.
En cuanto al rol actual de los medios locales, fue enfática en señalar: “Deben recibir toda la importancia y el reconocimiento que merecen. Son fundamentales por la cercanía y la inmediatez que tienen con el público, especialmente en zonas alejadas donde no llega internet, pero sí la radio, sobre todo en AM. Este es un justo reconocimiento, porque a pesar de que se ha intentado reemplazarla por otros medios, la radio nunca ha perdido su sitial: mantiene la confianza, la credibilidad, la cercanía y la rutina de acompañar siempre”.
Carolina estuvo acompañada en la ceremonia por su esposo Fernando y su madre Edurne. Sobre ello, comentó: “No vine sola, eso es cierto, y me sentí muy acompañada”, concluyó.
