Dicho texto busca colaborar con los municipios para evitar que la utilización de productos que no necesariamente contribuyen a la eliminación del virus, dañen el medio ambiente y asegurar que se utilicen productos adecuados para desinfección y que se apliquen de forma correcta.
En medio de la crisis sanitaria que vive el planeta producto del Covid 19, la ministra del Medio Ambiente, Carolina Schmidt junto a su par del ministerio de Ciencia, Tecnología, Conocimiento e Innovación, Andrés Couve lideraron una reunión virtual donde se dio a conocer el “Protocolo Buenas Prácticas Ambientales de Limpieza y Desinfección en lugares con alto tráfico de personas”. El documento busca colaborar con los municipios para evitar la utilización de productos que no necesariamente contribuyen a la eliminación del virus (productos de fumigación o incluso combustibles) y asegurar que se utilicen productos adecuados para desinfección y que se apliquen de forma correcta.
“La evidencia científica ha mostrado que las sustancias químicas aplicada ya sea a nivel domiciliario o masivo, pueden tener un impacto medio ambiental si no son bien utilizadas. Vivimos tiempos difíciles, pero no podemos olvidar que el autocuidado va de la mano con el cuidado del medio ambiente”, recalcó la ministra de Medio Ambiente, Carolina Schmidt.
En el lanzamiento también participó la Doctora Olga Barbosa, SEREMI de Ciencia Tecnología Conocimiento e Innovación de la macrozona Sur quien destacó el trabajo intersectorial entre los ministerios de ciencia y medio ambiente, junto al minsiterio de salud. “(el manual) busca ser una herramienta práctica para que los municipios e intendencias puedan focalizar o redirigir sus esfuerzos, cuidando a la ciudadanía, de manera que sean lo mas efectivos posibles, basándose en evidencia científica, y con el menor daño ambiental.” Explicó la autoridad.
Por su parte, el SEREMI de la cartera ambiental, Daniel Del Campo, señaló que “este manual contiene los lineamientos que buscan prevenir posibles impactos ambientales, haciendo recomendaciones sobre cómo efectuar dichos procesos de manera eficaz y amigable con nuestro entorno, especificándose, por ejemplo, las sustancias que no deben ser usadas y aquellas cuyo uso está prohibido en Chile”.
Según indica el protocolo, de no ser bien utilizadas, las sustancias químicas pueden terminar en fuentes de agua como canales de regadíos, ríos, lagos, humedales; producir intoxicaciones de los animales; alterar la calidad del agua; afectar la producción de alimentos, contaminar el suelo y, eventualmente, producir la muerte de polinizadores como abejas y aves, entre otros.
El manual puede ser descargado en este link : https://bit.ly/2XU8Jcm
