A fin de trabajar y abordar los desafíos del Programa de Regeneración de Conjuntos Habitacionales, el equipo del Minvu y Serviu, asistieron a capacitación nacional que permitió dar cuenta de los procesos regionales y los próximos pasos destinados a continuar con el plan maestro desarrollado para la región. Propuesta que tiene como próximo hito la primera piedra de las familias que serán reubicadas en el proyecto de Paillao y para lo cual el equipo regional se encuentra trabajando.
El director de Serviu, Raúl Escarate, enfatizó que en la jornada nacional se analizaron aspectos medioambientales destinados a reducir el impacto de la contaminación que provocan los residuos de obras, así como también talleres que permitieron analizar diversas realidades y buscar soluciones a problemas comunes con el objetivo de mejorar el trabajo que realizan los equipos regionales del programa de regeneración de Conjuntos Habitacionales.
Además, en la instancia se abordaron temáticas de participación ciudadana, comunicación y el trabajo intersectorial como soportes de un programa que descansa en el trabajo con los vecinos y dirigentes, en especial frente a los desafíos que comenzarán el próximo año con la construcción del nuevo conjunto.
La jornada también contempló la participación de XXI Bienal de Arquitectura y Urbanismo realizada en el persa Victor Manuel del sector Matadero Franklin, bajo la temática feria libre; en donde se abordó el eje de regeneración desde la perspectiva ministerial, académica y sociedad civil.
Antecedentes:
Cabe destacar que el Plan Maestro de Regeneración de Conjuntos Habitacionales en nuestra región, involucra a 256 familias, siendo 184 de estas correspondientes a San Pedro y 72 a Los Alcalde. De ellos y en la primera etapa, se considera la movilidad de 149 familias en un terreno de 1,9 há en Paillao, cuyas obras comienzan el próximo año.
Mientras que segunda etapa comprenderá la reubicación de familias en terrenos liberados en Conjunto San Pedro y que permitirá levantar un nuevo proyecto de alto estándar para 107 familias.
En ambos casos se trata de levantar un barrio que considere no sólo viviendas, sino equipamiento comunitario, áreas verdes y de esparcimiento que contemplan juegos y espacios deportivos.
