La resolución del Tribunal implica que el proyecto queda detenido y sin posibilidad de avanzar, al menos mientras se encuentre vigente el juicio. Desde la organización destacaron que la medida constituye un hito relevante para la defensa del río y las comunidades que han manifestado preocupación por los impactos de la iniciativa salmonera.
El Tribunal Ambiental consideró que en este caso se cumplen los requisitos legales para otorgar una medida cautelar. Entre ellos, la apariencia de buen derecho, señalando que existen antecedentes suficientes para cuestionar la legalidad de la RCA y los posibles efectos ambientales asociados al proyecto. Asimismo, se reconoció la existencia de peligro en la demora, advirtiendo que permitir el avance de la piscicultura podría generar afectaciones graves e irreversibles en el ecosistema del Río San Pedro.
Desde el movimiento Río San Pedro Sin Salmoneras valoraron la decisión, calificándola como un avance significativo para las comunidades locales y para la protección del territorio. La ONG Defensoría Ambiental, que representa jurídicamente al movimiento, señaló que la suspensión de la RCA “refleja la importancia de adoptar acciones preventivas ante proyectos que podrían poner en riesgo ecosistemas sensibles”.
La causa principal —que busca determinar la caducidad de la RCA otorgada al proyecto— continuará su tramitación en el Tercer Tribunal Ambiental, mientras la piscicultura permanecerá paralizada hasta que exista una resolución definitiva.












