Columna de opinión, Marco Leal Ruiz, candidato a Consejero Regional
Estamos en el mapa nacional como “la catedral del básquetbol; un título que se lleva con mucho orgullo y que ha sido motivo de pasión y alegría para Valdivia y la región en general. Sin embargo, de acuerdo a las conversaciones que he sostenido con distintos dirigentes, entrenadores y familias ligadas a este deporte, estamos en pañales en cuanto al apoyo de los talentos de los clubes infantiles.
Me atrevo a escribir estas líneas porque son muchos los argumentos que existen para que este escenario podamos cambiarlo de forma colectiva y aunando esfuerzos y voluntades. Y es importante, porque la práctica deportiva en la etapa infantil o adolescencia no sólo está asociada al mero entretenimiento, sino que también está relacionada a estimular y fomentar la vida saludable; el trabajo en equipo; inculcar valores como la solidaridad, la responsabilidad y la perseverancia. Es decir, potencia sus destrezas y además contribuye a fortalecer sus habilidades sociales.
Pero me quiero detener en un tema de salud pública y lo vinculo al básquetbol porque se relaciona a nuestra identidad local, como también lo puede ser el remo, el fútbol, el atletismo u otros deportes emergentes. Lamentablemente, contamos con cifras alarmantes en cuanto a obesidad infantil en el país, y Los Ríos es una de las regiones que encabeza esa lista de preocupantes números. Sabemos que el Gobierno está tomando cartas en el asunto con programas y acciones estratégicas interministeriales, pero creo que como región no nos podemos quedar de brazos cruzados mirando cómo se ejecutan estos planes. Podemos ser actores claves e impulsar, más allá de la política regional del deporte en desarrollo (y que tanta falta nos hace), con hechos concretos y más inmediatos para hacer frente a este complejo panorama actual donde más del 50% de niños entre 5 y 7 años presenta obesidad o sobrepeso.
Por eso desde el Consejo Regional sí se pueden gestionar acciones que apunten hacia un buen camino,y mi compromiso será promover y apoyar el trabajo que desarrollan los clubes deportivos que trabajan con niños y adolescentes en la articulación de recursos ya sea a través de la conjugación de fondos regionales, municipales, participar en la gestión de proyectos con otras entidades que provean recursos para el financiamiento de capacitaciones, entrenadores de primer nivel, equipamiento y espacios adecuados para entrenar; porque hasta ahora contamos con la camiseta y garra de sus dirigentes y familias para sacar adelante los sueños del básquetbol infantil.
Debemos poner los esfuerzos en las series infantiles, son el semillero del básquetbol regional y nacional. Seamos parte activa de esa construcción; ayudemos a ese futuro porque son estos niños y niñas quienes formarán las ligas adultas. Fortalezcamos y enraicemos nuestra cultura deportiva desde la infancia.
