La Contraloría General de la República desestimó la presentación realizada por el ex-director del Colegio de Cultura y actual pre-candidato del Partido Socialista, David Martínez, contra el actual director de dicho establecimiento, Rodrigo Faulbaum, donde Martínez solicitaba que se deje sin efecto el Decreto de su nombramiento y el concurso público del que Faulbaum resultó ganador.
Según argumentó Marínez en su presentación, la solicitud obedece a que según se evidenció en el oficio N° 3.601 de la Contraloría Regional de Los Ríos en 2015, en la “documentación no se advierte que el aludido docente, tenga perfeccionamiento en las áreas pertinentes a la función directiva, incumpliendo de esta forma, una de las exigencias legales para incorporarse a la dotación docente en un cargo de dicha naturaleza. Por consiguiente, cabe concluir que el nombramiento dispuesto como director del antedicho establecimiento educacional, no se ajusta a derecho, por lo que procede que la Municipalidad de La Unión arbitre, a la brevedad, las medidas conducentes para ajustar su actuación a la normativa vigente, las que deberán ser informadas a esta Institución Fiscalizadora dentro del plazo de 30 días a contar de la total tramitación del presente oficio “.
Posterior a ello, el municipio de La Unión también realizó una presentación ante la Contraloría, solicitando que se reconsidere lo señalado en el oficio 3.601, en atención a que Faulbaum si contaría con el perfeccionamiento requerido por la normativa, adjuntando para estos efectos, un certificado del año 2014 de la entidad de formación “ATE OrgoCultura”.
Finalmente, tras le revisión de los antecedentes la Contraloría General de la República determinó dejar sin efecto el recurso presentado por el ex-director del Colegio de Cultura, David Martínez.
El documento final sostiene que “que el curso en el área directiva que realizó el señor Faulbaum Gómez, fue impartido por la institución ATE OrgoCultura, entidad pedagógica registrada en el Ministerio de Educación, y que en este sentido puede entregar un servicio de asistencia técnica educativa”.
Al respecto David Martínez señaló que lamenta “lo resuelto por la Contraloría en orden a reconsiderar lo determinado en primera instancia; está claro que la ley, en definitiva, adolece de un vacío y por eso estas dos interpretaciones del mismo órgano jurídico, pues la resolución señala que en definitiva cualquier curso, independiente de las horas y del tipo de institución y lo que es más sorprendente, la calidad y nivel de dichos cursos, son válidos”.
“Sólo resta dar vuelta la pagina y esperar que en algún momento se corrija este tipo de interpretaciones”, concluyó.
El informe completo Aquí.
