Fundado el 2 de febrero de 2005 como colegio de lenguaje, El Umbral nació para responder a las necesidades educativas de la comuna, transformándose en 2013 en un colegio especial de estimulación que atiende a niñas y niños con necesidades educativas permanentes y transitorias. Bajo la dirección de Marcela Barrientos Puebla, el establecimiento ha crecido hasta contar con una matrícula de 136 estudiantes entre 2 y 6 años, y un equipo de 14 profesionales que incluye educadoras diferenciales, fonoaudiólogas, terapeuta ocupacional, psicólogo, profesora de educación física y técnicos especializados
La comunidad educativa vivió una jornada llena de emociones, marcada por el reencuentro con sus primeras generaciones, exfuncionarios y quienes estuvieron en los inicios del proyecto. La ceremonia incluyó un emotivo discurso por parte de una apoderada, quien expresó su gratitud hacia el colegio por su compromiso y acompañamiento constante. Además, un exalumno del establecimiento deleitó a los asistentes con un número musical, interpretando melodías de la reconocida serie infantil 31 Minutos, lo que fue ampliamente aplaudido por el público.
Durante la actividad también se realizaron reconocimientos a docentes y trabajadores del establecimiento, valorando su entrega y dedicación a lo largo de estos años. En medio de la ceremonia, los asistentes disfrutaron de un colorido número de baile protagonizado por estudiantes del colegio, quienes demostraron entusiasmo, alegría y sentido de pertenencia hacia su institución, emocionando a las familias y autoridades presentes.
Marcela Barrientos Puebla, directora del colegio, expresó su profunda emoción durante la conmemoración del vigésimo aniversario, destacando la presencia de figuras clave en la historia del establecimiento. “Hoy se vivieron muchas emociones, porque vinieron personas importantes: la primera directora, nuestra primera tía técnico, exfuncionarios y las primeras apoderadas. En el año 2013 pasamos de Escuela de Lenguaje a Escuela Especial de Estimulación, y hoy nos acompañan también nuestros primeros estudiantes. Hemos crecido bastante y estamos muy contentos, porque sabemos que entregamos una linda educación basada en valores y respeto”, afirmó.
La directora también proyectó los desafíos y sueños que vienen para la institución. “Queremos seguir creciendo, capacitándonos y sumando más profesionales de apoyo. Ya contamos con terapeutas ocupacionales, fonoaudiólogos y psicólogos, pero esperamos en el futuro incorporar asistentes sociales, kinesiólogos y más especialistas. Nuestro objetivo es ampliar y cubrir las necesidades de los niños y sus familias, fortaleciendo así nuestro compromiso con la educación especial y la comunidad de La Unión”, concluyó.
“Estoy tremendamente emocionada”, expresó María Carolina Prado, representante legal de la Corporación de Educación El Umbral, al compartir sus sentimientos en el aniversario número veinte del establecimiento. “Partimos con dieciocho alumnos y hoy ya tenemos veinte generaciones de egresados. Hemos visto crecer a nuestros niños, verlos en la universidad, trabajando, y ver a sus familias tan comprometidas. Es algo muy emotivo, porque este proyecto pequeño logró consolidarse y transformarse en algo importante para La Unión”, afirmó con orgullo.
Prado también hizo un llamado a fortalecer el área de educación especial, destacando el trabajo que realizan junto a profesionales y servicios de salud. “Sabemos que hay mucha necesidad, por eso queremos que más niños puedan acceder. Ofrecemos una educación gratuita, con apoyo de fonoaudiólogos, psicólogos y terapeutas, además del bus y los útiles escolares. Somos una escuela de puertas abiertas: cuando quieran ir a ver cómo trabajamos, vayan, conozcan, porque esto es un aporte real para la comunidad”, subrayó.
El supervisor del Departamento Provincial de Educación del Ranco, José Ignacio Calfucura Hernández, expresó su alegría por acompañar al Colegio El Umbral en una fecha tan significativa, destacando el compromiso y la vocación de su equipo. “Para nosotros como Ministerio de Educación es un orgullo y una alegría estar presentes en esta celebración. Conocemos el establecimiento, a su directora y la gran labor que realiza toda la comunidad educativa de La Unión. Veinte años representan historia, esfuerzo y dedicación, y este colegio ha sabido consolidarse como un referente en la provincia”, manifestó.
Marcela Otaiza, primera directora con la que contó el Colegio El Umbral y quien actualmente reside en otra región, vivió con profunda emoción el aniversario del establecimiento, al que vio nacer y crecer desde sus inicios. “Ha sido tremendamente emocionante, hemos llorado desde la mañana. El colegio está lleno de niños, partimos siendo una escuela pequeña y hoy ya no es una escuelita, es un colegio”, expresó con orgullo. Otaiza también valoró la continuidad y el compromiso del equipo educativo: “Hay varias profesoras que estaban cuando yo partí, y me alegra ver cómo han mantenido vivo este proyecto. Han hecho un lindo trabajo, y eso me hace muy feliz”.
El aniversario número veinte del Colegio El Umbral dejó en evidencia no solo la historia y los logros alcanzados, sino también el fuerte lazo humano que une a su comunidad. Entre recuerdos, emociones y nuevos desafíos, la jornada reafirmó el compromiso del establecimiento con la inclusión, la educación de calidad y el desarrollo integral de los niños y niñas de La Unión.
















