En el marco del concejo municipal de La Unión realizado este miércoles, el concejal Said Neira planteó serias observaciones respecto al uso de recursos en la Oficina de Seguridad Pública, tras revisar un informe de gastos de personal y horas extraordinarias correspondiente a los últimos meses.
El edil detalló que “el gasto oficial en personal es de 6 millones 277 mil pesos aproximadamente mensual, lo que da un costo de 75 millones 324 mil pesos al año, descontando las horas extra. En total tenemos 4 millones 44 mil pesos en horas extra en ocho meses. Eso equivale a 794 horas en total, que si uno lo saca a días son 99 días”.
Neira calificó como “exorbitante e inaceptable” el nivel de horas extraordinarias, afirmando que “me parece algo que no corresponde, porque siempre decimos que no tenemos plata y dar esta cantidad de horas extras me parece algo que no corresponde”.
Durante su intervención, el concejal también pidió explicaciones sobre la recontratación de un funcionario que había renunciado voluntariamente en julio y fue reincorporado en septiembre del mismo año. “Esta persona renunció, fue a buscar otro lugar de trabajo, no le resultó bien y vuelve acá como si nada a la municipalidad. Entonces mi pregunta es: ¿por qué esta persona tiene un lugar seguro si es que se va de aquí?”, señaló.
El edil cuestionó el precedente que podría sentar esta situación: “Esto implica que todos los funcionarios, si quieren retirarse y buscar una mejor vida en otro lugar, van a poder reintegrarse. No creo que ese tema funcione así”.
En la misma línea, Neira reiteró su solicitud —hecha hace dos meses— de que el equipo de Seguridad Pública realice patrullajes a pie por los sectores comerciales, destacando que no ha visto presencia en terreno. “Yo pasé por comercio, por Serrano, por la calle Prat y pregunté: ¿ustedes conocen a la gente de Seguridad Pública? Y me respondieron que no”, relató.
Asimismo, advirtió sobre la necesidad de fortalecer la cercanía con la comunidad y evitar que se repitan casos de suplantación de funcionarios. “La idea es que conozcan a la gente, que hagamos el trabajo, que seamos más cercanos, ayudemos al adulto mayor, ganémonos a la gente”, enfatizó.
Finalmente, el concejal propuso intensificar la fiscalización en puntos conflictivos del centro, mencionando la esquina de calle Comercio con Riquelme: “A estos tipos hay que fiscalizarlos todos los días, hacerles control de identidad, porque todos sabemos que están bebiendo en la vía pública. Si los fiscalizamos todos los días, se van a otro lado y nos evitamos este problema”.
Tras la intervención, el alcalde informó que las consultas serán respondidas por escrito.
















