Vivimos en un mundo en el que la tecnología se ha convertido en una parte más de nuestro día a día. Tanto es así que no podemos imaginarnos un mundo sin una conexión a la red, a la que acceder para obtener diversos servicios y productos. Cada día encontramos más herramientas virtuales disponibles que no hacen otra cosa que facilitarnos la vida. Pero no solo como individuos, ya que esto también ha empezado a cambiar la forma de ofrecer bienes y servicios, o incluso de trabajar, cosa que ha quedado más que demostrado durante la reciente crisis sanitaria que ha afectado a la inmensa mayoría de países.
Las tecnologías 4.0, han llegado para quedarse
La tecnología 4.0 se refiere a lo que se dice que será una nueva fase dentro de la Revolución Industrial, la Cuarta Revolución Industrial, y se centra principalmente en la interconectividad, los datos a tiempo real, el aprendizaje automático y la automatización. También se conoce como fabricación inteligente y combina operaciones físicas con lo último en tecnología para poder generar un ecosistema mejor conectado dentro de las empresas. Si bien cada compañía es diferente, todas se encuentran con un desafío similar: acceder a la información de productos, socios, procesos o personas a tiempo real y la necesidad de conexión.
Y es que la nueva industria 4.0 engloba tanto el ciclo de vida de un producto como la cadena que se utiliza para suministrarlo: desde el diseño, a la venta, pasando por el servicio al cliente. Algunas de las tecnologías que se incluyen en esta nueva revolución son la robótica con aplicaciones en diversos campos como la medicina o la enseñanza, entre otras; la nube, ya no solo como lugar donde guardar los datos de los usuarios, sino como forma de compartir; las criptomonedas, una nueva forma de pago que ya es aceptada en negocios online de todo tipo, desde grandes cadenas de comida o viajes, hasta los casinos online como VegasSlotsOnline, tan populares a día de hoy; inteligencia artificial para ofrecer todo tipo de recomendaciones especializadas a los consumidores; o simulaciones, entre otras.
50 mypimes colombianas se fortalecieron en tecnologías 4.0
Si algo ha dejado clara la crisis, ha sido que las tecnologías 4.0 son necesarias en la actualidad. Las empresas, tanto grandes como medianas y pequeñas, ya no solo deben preocuparse de la actividad diaria, sino que también deben adaptarse a los nuevos tiempos y saber integrar las herramientas disponibles. 50 mipymes colombianas fueron seleccionadas entre una muestra de 100 para formar parte de un proyecto para fortalecer la competitividad y la productividad a través de las tecnologías 4IR, ofrecido el Centro para la Cuarta Revolución Industrial de Colombia en Medellín (CTA), con la ayuda de Innpulsa.
El proyecto dio comienzo en noviembre, mes en el que se presentaron las diversas empresas interesadas, siendo su objetivo principal impactar de manera positiva a la productividad de esta selección de empresas gracias a la implementación de nuevas tecnologías como el blockchain, el Internet de las cosas (IoT) o la inteligencia artificial. De estas 50 compañias, Innpulsa y CTA elegirá a un total de 10 para realizar un piloto de uso de esta tecnología.
Sudáfrica y Colombia y el acuerdo para explorar oportunidades en esta área
Sudáfrica y Colombia han firmado un acuerdo recientemente para poder aprovechar las oportunidades que ofrece a ambos países la Cuarta Revolución Industrial en áreas como el Internet de las cosas, o la inteligencia artificial, así como aumentar las capacidades en la investigación de ambos. La firma del convenio se realizó por parte de Agostinho Almeida y Thulani Dlamini, el director ejecutivo del Centro para la Cuarta Revolución Industrial de Colombia y el director ejecutivo de CSIR, respectivamente.
Con él se pretende abrir el camino para poder promocionar intercambios de experiencia y conocimientos en las investigaciones tanto en ciencia como en tecnología. Como bien comentó el Embajador de Colombia en Sudáfrica, Carlos Andrés Barahona, este acuerdo supone un hito para las relaciones entre ambos países que pueden resultar muy beneficiosas.
Parece que el país latinoamericano no quiere perder ninguna de las oportunidades que ofrece este nuevo mundo lleno de tecnología y ciencia, en el que aún queda mucho por descubrir, y en el que quieren estar. Hecho que ya han demostrado con los recientes programas y acuerdos firmados.