La Corporación Bicentenario de La Unión, representada por diferentes organizaciones sociales, culturales y gremiales, realizó “un llamado a los vecinos a no perder la cordura”, considerando la actual situación mundial.
Desde la organización señalaron que es necesario que, con esta pandemia, exista la posibilidad de habilitar a fiscalizadores que puedan asegurar de que las personas cumplan con los protocolos básicos sanitarios de distancia física, preferencia a embarazadas, minusválidos y adultos mayores y la obligación de uso de mascarillas, ya que “todavía se ve gente en las calles que no respeta estas reglas, colocando en riesgo la salud de los demás, por lo tanto este es un llamado a cuidarse y cuidar a otros, sobre todo ahora que cada día son más las personas infectadas con el COVID-19”.
Además, desde la entidad manifestaron que es importante respetar a las personas que por obligación deben asistir a sus trabajo, considerando el episodio que ocurrió con los recolectores de basura donde en un acto de inconciencia un conductor de camión se abalanzó hacia una persona que trabaja en ese servicio. “Esto resulta condenable desde todo punto de vista, puesto que esas personas son fundamentales para mantener seguridad e higiene para toda la población, y por el contrario se deben respetar porque forman también una “primera línea” que muchas veces se invisibiliza”.
Para la comisión, dentro de esta situación recordaron que hay algunas actividades cotidianas que muchas personas no pueden hacerlas por si solas, por el riesgo que corren al ser parte de la población vulnerables por enfermedad o simplemente corresponder a la población de adulto mayor, por eso se requiere de la voluntad de sus cercanos “y en esta instancia se insta a que jóvenes puedan acercarse para asistirlos, eso constituye un acto de nobleza que ciertamente será agradecido por las familias y lo más importantes por las propias personas que son ayudadas”.
También hicieron hincapié en que estas últimas semanas en La Unión se han cometido diversos actos delictuales, relacionados con robos en lugares habitados, abigeatos, peleas de algunos grupos con armas blancas y de fuego, “lo que resulta muy complejo para la ciudad. Para esto es fundamental un mayor resguardo policial, así como también la colaboración de los afectados para que denuncien estos hechos. Existen cámaras de seguridad que no están vigentes, lo cual resulta un riesgo permanente porque estas se encuentran supuestamente en lugares estratégicos de la ciudad, sin embargo, si no funcionan no tiene sentido tenerlas. En algún momento se mencionó la posibilidad de tener seguridad ciudadana, pero no hay nada concreto al respecto”, concluyeron.