Por Sergio Florín
Debió pasar más de un siglo para que los bomberos voluntarios de la Primera Compañía Germania de La Unión vivieran la experiencia de poder importar una máquina para el combate de incendios, auténticamente alemana, la patria de quienes fundaron esta unidad en octubre de 1869.
Remontándonos al pasado, efectivamente en 1907 cuando lideraba a los bomberos de esta compañía de inicios del siglo pasado el Capitán Carlos Crass, se vivía entre sus filas y en el pequeño poblado la misma emoción, pues luego de contactos y cartas que iban y venían se lograba la adquisición, en aquel entonces desde el Imperio Alemán, de una moderna bomba a vapor, la que llegaría a esta localidad a mediados de ese año. En Chile el gobierno estaba en manos del Presidente Pedro Montt, por tanto esa bomba que se guarda como venerada reliquia lleva el nombre de ese ilustre mandatario.
Pasaron los siguientes ciento diez años en que los bomberos voluntarios de la Germania no pudieron contar más, con un carro auténticamente alemán. Sólo vehículos menores adaptados para llevar rollos de mangueras, los nostálgicos “autogallos” y recién en 1961 llegaría un carrobomba Ford Darley desde los Estados Unidos, hasta que a partir del año 1980 en adelante diversos carros de la marca Berliet Camiva y Renault Camiva de origen francés formarían parte de su parque automotriz, tanto para el combate de incendios como de la especialidad forestal inicial y la ya definitiva de rescate vehicular.
Por tanto, el sueño de más de un siglo se comenzó a fraguar hace más de un año, con los primeros cálculos y definición de qué se requería acorde a los tiempos actuales, contándose con los buenos oficios y aporte financiero dispuesto por el Alcalde y el Concejo Municipal, la empresa privada, la Junta Nacional de Cuerpos de Bomberos de Chile, del propio Cuerpo de Bomberos de La Unión, cerrando este círculo el monto mayor, aportado por el Gobierno Regional a través del Fondo Nacional de Desarrollo Regional. Todo lo anterior asciende finalmente a la suma de doscientos cincuenta millones de pesos de costo de esta nueva máquina.
Precisamente y dada la importancia de esta inversión, considerando su construcción a la medida de las reales necesidades locales, se designó un equipo de supervisión para efectuar una visita previamente concertada a la fábrica Magirus en la ciudad de Ulm, Alemania. De esta forma, con recursos propios más un aporte de un 30% de los gastos que efectuó la institución, viajaron el Director Juan Pablo Zwanzger García y el Capitán Cristian Marcelo Florín Soto. Por decisión personal y pagando todos sus gastos, les acompañaron los voluntarios Harry von Johnn Rosas, Federico Flores Zapata y Daniel Amthauer Burgos.
En la visita efectuada este martes 24 de julio a la fábrica se pudieron imponer en terreno de los avances del diseño de la máquina, efectuándose allí las observaciones o comentarios que fueron necesarios y en el tiempo preciso. Se trata de un carrobomba Man Magirus TGM 18340 4×2, el que estaría llegando a nuestro país en la segunda mitad de la primavera de 2018. Este moderno carro viene completamente equipado para rescate vehicular y obviamente también será un importante apoyo para incendios estructurales que eventualmente lo requieran.
